24/6/21

Lo posible y lo imposible

Por Jesús Mosterín

El lenguaje y el pensamiento lingüístico son instrumentos formidables para enfrentarnos a los problemas que nos presenta la vida y el entorno, para resolverlos colectivamente y para satisfacer nuestras necesidades. Pero al tiempo que el lenguaje facilita nuestra vida, la complica. Y al tiempo que el pensamiento simbólico nos permite solucionar nuestros problemas reales, nos induce también a enredarnos en seudoproblemas sin sentido, extrapolando a lo invisible y lo imaginario pautas de preguntas y de respuestas que hemos aprendido a usar en lo visible y lo próximo. El animal prelingüístico se acurruca aterrorizado ante la tormenta y el rayo, pero no articula lingüísticamente su terror, no se plantea preguntas. El humán que ha aprendido a preguntar quién ha lanzado la piedra que acaba de golpearle en la espalda pronto preguntará también quién ha lanzado el rayo que acaba de caer en el bosque, y pronto razonará que si la piedra ha sido lanzada por un compañero enfadado con él, también el rayo habrá sido lanzado por alguien poderoso y enfadado. Y se planteará el inédito problema (o seudoproblema) de cómo aplacar el enfado de ese misterioso personaje. El animal prelingüístico se retuerce de dolor y desesperación ante la muerte de su infante, pero no articula en palabras su horror por la súbita frialdad del cadáver. El primitivo humán o neandertal se pregunta que adónde habrá ido su infante muerto, si no habrá emprendido un largo camino, y razona que quien emprende un largo camino necesita alimentos, armas y provisiones. Naturalmente no tenemos ni idea de si el primitivo Homo neanderthalensis pensaba eso o algo completamente distinto. Lo cierto es que, por primera vez, los homínidos no dejan abandonados a sus muertos a merced de los carroñeros, sino que los entierran con regalos y ceremonias. La religión, la magia y los enterramientos aparecen junto con el lenguaje. El uso del lenguaje y del pensamiento simbólico, a diferencia de la percepción y de las habilidades sensoriomotrices, no conoce fronteras. No solo nos sirve para describir lo que vemos, sino también para inventar y describir lo que no vemos, lo real y lo irreal, lo posible y lo imposible. No solo nos sirve para acertar, sino también para equivocarnos. Llegados a este estadio, el del Homo sapiens, y aunque no dispongamos de documentos escritos, podemos estar seguros de que la historia del pensamiento se ha puesto en marcha.

Fuente: Mosterín, J. (2006), El pensamiento arcaico, Alianza Editorial, Madrid.

17/6/21

El decálogo liberal

Por Bertrand Russell
Los Diez Mandamientos que, como enseñante, me gustaría promulgar, se podrían formular de la siguiente manera:
1. No estés absolutamente seguro de nada.
2. No creas conveniente actuar ocultando pruebas, pues las pruebas terminan por salir a luz.
3. Nunca intentes oponerte al raciocinio, pues seguramente lo conseguirás.
4. Cuando encuentres oposición, aunque provenga de tu esposo o de tus hijos, trata de superarla por medio de la razón y no de la autoridad, pues una victoria que dependa de la autoridad es irreal e ilusoria.
5. No respetes la autoridad de los demás, pues siempre se encuentran autoridades enfrentadas.
6. No utilices la fuerza para suprimir las ideas que crees perniciosas, pues si lo haces, ellas te suprimirán a ti.
7. No temas ser extravagante en tus ideas, pues todas las ideas ahora aceptadas fueron en su día extravagantes.
8. Disfruta más con la discrepancia inteligente que con la conformidad pasiva, pues si valoras la inteligencia como debieras, aquélla significa un acuerdo más profundo que ésta.
9. Muéstrate escrupuloso en la verdad, aunque la verdad sea incómoda, pues más incómoda es cuando tratas de ocultarla.
10. No sientas envidia de la felicidad de los que viven en el paraíso de los necios, pues sólo un necio pensará que eso es la felicidad.
Fuente: Russell, B. (2010), Autobiografía, Edhasa, Barcelona.

10/6/21

Personas capaces de pensar

Por Noam Chomsky
Todos hemos estudiado el primer párrafo de La riqueza de las Naciones de Adam Smith que hablaba del carnicero, del panadero, de que todos trabajan juntos y de lo fabulosa que es la división del trabajo. Pero no muchos han llegado, por ejemplo, al libro quinto, donde Smith condena la división del trabajo porque dice que convierte a la población en criaturas de lo más ignorantes y estúpidas, ya que dedicarse a tareas simples y rutinarias les impide desarrollar su inteligencia y su capacidad creativa. Por consiguiente, urge que en toda sociedad civilizada el gobierno intervenga para evitarlo.
Somos seres humanos, no autómatas. Trabajamos en un empleo, pero no dejamos de ser personas. Y eso significa beneficiarse de las ricas tradiciones culturales, no únicamente de las propias, sino de muchas otras, y volvernos no sólo hábiles, sino también sabios. Convertirnos en personas capaces de pensar –pensar de forma creativa, de forma independiente, investigar, indagar– y contribuir a la sociedad. De lo contrario, bien podría sustituirnos un robot. Creo que es algo que no debe pasarse por alto si queremos una sociedad donde merezca la pena vivir.
Fuente: Chomsky, N. (2017), Réquiem por el sueño americano, Sexto Piso, Madrid.

3/6/21

Hiparco

Por Jesús Mosterín

Imagen tomada de https://bit.ly/3lrAliM

Hiparco es considerado como el más grande observador astronómico de la Antigüedad ... Fue él quien introdujo en la astronomía helenística la idea de la observación sistemática y de la predicción exacta, que debe concordar con las observaciones posteriores. Introdujo la trigonometría en forma de tabla de cuerdas. Desarrolló la geometría de los epiciclos y deferentes, usados más tarde por Ptolemeo. Fue el primer astrónomo que construyó modelos cuantitativos precisos de los movimientos del Sol y de la Luna, haciendo uso de la riqueza de datos acumulados por los astrónomos babilónicos durante muchos siglos. Es probable que fuera el primero en poder predecir los eclipses solares, basado en su teoría de los movimientos solares y lunares y en su trigonometría.

Fuente: Mosterín, J. (2007), Helenismo, Alianza Editorial, Madrid.